No podrás resistir la belleza arquitectónica de muchas iglesias coloniales en El Salvador

No podrás resistir la belleza arquitectónica de muchas iglesias coloniales en El Salvador

El Salvador se caracteriza por poseer iglesias con un valor arquitectónico y que están dispersas en todos sus departamentos. El tiempo parece no pasarle factura y la religiosidad a través del catolicismo se pone de manifiesto de generación a generación.

Iglesia de San Francisco Gotera

La parroquia San Francisco de Asís de San Francisco Gotera, Morazán, es una joya histórica y con mucha identidad y valor cultural.

Contemplar esta obra de arte es hacer una remembranza al pasado. Su reloj representa el reflejo de la religiosidad en este pintoresco municipio. 

Esta pieza, la que faltaba, tenía mucha influencia en los habitantes porque establecía los tiempos de cada de ellos, y sus respectivos quehaceres cotidianos.

Y la costumbre se fue perdiendo en la medida que se deterioraba con el paso de los años pero ahora, ya cumple su función tras ser restaurado en 2020.

La tradición católica en Santa Elena, Usulután 

Este templo data desde siglos pasados y denota la orientación católica de la comunidad elénica.

Así el templo reúne a los feligreses en una tradición que se transmite de generación a generación.

El ejemplo más claro fueron las recientes actividades de la Semana Santa en las que numerosos feligreses asistieron devotamente a todos los ritos religiosos.

Por tradición, cuando alguien muere, llegan los amigos y parientes de la familia doliente a cuyos miembros expresan sus muestras de pesar mientras degustan de tamales, café, pan, cigarros y hasta licor.

Iglesia de Cacaopera, cuna de los Kakawiras

En el centro de Cacaopera, uno de los municipios que pertenece a la Ruta de La Paz, se ubica esta iglesia colonial. 

La estructura presenta un matiz de amplio bagaje. 

Tallado con una fina y exquisita moldura no tiene nada que envidiarle a otras edificaciones con pasados históricos. 

El transcurrir del tiempo parece no pasarle factura al conservar su estética, atractivo y lucidez si dejar de lado el vanguardismo. 

Su pueblo descendiente de los Kakawiras o Cacaoperas, grupo étnico procedente de Nicaragua, asiste a la iglesia para darle gracias a Dios.

La iglesia de Chilanga, Morazán 

En la parte frontal del templo se lee 1881, en alusión a su fecha de fundación. 

Para ese período durante el gobierno del presidente Rafael Zaldívar se extinguió por decreto las tierras comunales y ejidales consideradas aptas para el cultivo del café. 

Desde esa fecha los habitantes no dejan de asistir a la iglesia y especialmente en las distintas fechas religiosas de la comunidad católica.

Iglesia Conchagua, un reflejo del barroco y el renacimiento

Quienes visitan el municipio de Conchagua se detienen para contemplar o ingresar en la iglesia colonial, considerada la más antigua de El Salvador.

El templo fue fundado en 1693 tras varios años en construcción a cargo de Wenceslao Ramírez y Antonio García, quienes estamparon un estilo barroco y renacentista en su interior.  

Esta hecho de una mezcla de arena, cal, piedra y claras de huevo con unas paredes que alcanzan cerca de un metro de anchura.

Probablemente por tal razón su estructura solo ha sufrido una sola reestructuración entre 1966 y 1968.

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