A base de leña y con hierbas aromáticas así se teje una buena alimentación con carne de cerdo.
Mamá Paula siempre se las ingenia para ofrecer lo mejor a sus clientes.
Un buen asado en plena leña le da una riqueza natural a todo lo que vende en el negocio que ella bautizó como el cuchódromo Mama Paula,
En el negocio los platillos van desde unos exquisitos chicharrones hasta costilla, dos de las especialidades más preferidas de los salvadoreños.
Y si el cliente quiere otras opciones también lo encontrará. Sabe que los gustos son variados y que no todos consumen lo mismo.
Por eso nunca falta el pollo, el pescado, hígado, bien acompañados de un rico arroz con su respectiva enseñada.
Mamá Paula representa la característica de muchos. Una mujer laboriosa, entregada al trabajo y pujante, siempre como toda una buena emprendedora. Añade que todo lo que sabe se lo hereda de su mamá.
“Yo aprendí con mi mamá, los chicharrones que hacemos son muy buenos, (…), y siguiendo las recetas de los abuelos las yo cocino con hierbas aromáticas, casi todo es natural acá”, afirma.
Del cerdo, dice, decidió instaurar un negocio como apuesta porque es lo que más vende. A la gente, le gusta indica.
El Cuchodromo mamá Paula se encuentra en el corazón del San Rafael Obrajuelo, en La Paz. Solo llega al parque municipal, busca el negocio e inmediatamente lo encontrará. No hay donde perderse. Por ahora, solo cuenta con una sede pero su meta es expandirse.
